Mañana domingo rodamos el video promocional de la campaña de crowdfunding. Después de una dinámica de presentación este será el primer poema que voy a narrarles a los niños. Yo soy, he sido, y probablemente siga siendo una persona vergonzosa y nunca me cuadró aquello que nos decían en el colegio de que dejáramos la vergüenza en casa. Cuando volvía me la encontraba sentada enfurruñada y la verdad es que la comprendía. Si es un rasgo de mi personalidad ¿No es mas respetuoso con mi persona acogerla, aceptarla y de algún modo pactar con ella?. Así que como imagino que estarán todos un poco nerviosos (igual que yo), espero que este poema y la introducción que de él haré, los relaje y nos abramos todos a disfrutar de la tarde entre los olivos Gerenenses.
DOÑA VERGUENZA
-Toc, toc
-¿Quién es?
-Tu verguenza.
-Pasa y entra.
Te daré una tila o una menta
si mi corazón no aceleras.
Mucho tengo que hacer
y siempre me camelas
para no hablar, ni actuar,
y mucho menos ¡besar!
Venga pasa y toma asiento
que empieza el experimento.
¡No! que me da verguenza.
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